En medio de risas y diversión, el Agronómico Salesiano clausura el Oratorio Vacacional
El viernes 1 de agosto, los patios de la Unidad Educativa Agronómico Salesiano se llenaron de entusiasmo y emoción para celebrar la clausura del Oratorio Vacacional Tarcisio Batocchio, un espacio pensado para que niños y jóvenes vivan sus vacaciones en un ambiente de alegría, formación y espiritualidad, tal como lo soñó san Juan Bosco.
Después de dos semanas intensas de actividades, los 69 niños y niñas participantes, junto a sus 34 animadores, culminaron esta experiencia con una jornada especial que congregó a toda la comunidad. El evento inició con las palabras de bienvenida y una oración por parte de Saúl Guamán, director de la comunidad del Agronómico Salesiano, quien agradeció el esfuerzo conjunto de animadores, docentes y familias.
A continuación, se presentaron los números artísticos preparados por cada grupo del oratorio. Los más pequeños, de seis años, ofrecieron un baile con la canción infantil «René», mientras que los grupos presentaron, cada uno, un dinámico mix de canciones guiados por sus gustos musicales, que demostraron la creatividad y el trabajo en equipo de los animadores con sus respectivos grupos.
La celebración continuó con una serie de actividades recreativas organizadas para que los niños disfruten de una mañana inolvidable. Una de las favoritas fue la estación de caritas pintadas, donde los animadores llenaban de alegría a los niños mientras pintaban en ellos sus personajes favoritos. Además, se instaló una feria de juegos, donde los participantes pudieron correr, competir y compartir momentos de diversión con sus compañeros.
Para cerrar la jornada con broche de oro, se realizó una rifa general con fabulosos premios, que despertó emociones entre los asistentes y dejó en todos un grato recuerdo. La presencia de padres de familia, autoridades institucionales, docentes y acompañantes reafirmó el valor de la corresponsabilidad educativa, fortaleciendo el vínculo entre hogar, escuela y comunidad salesiana.
La clausura del Oratorio Vacacional fue una celebración de una experiencia profundamente significativa. Durante estas semanas, el Agronómico Salesiano ofreció, como en Valdocco, un ambiente seguro, alegre y formativo donde los niños encontraron una segunda casa. Con dinámicas, juegos, salidas, visitas a la granja, cine, ferias y muchos momentos de reflexión, se vivió a plenitud el sueño de Don Bosco: educar evangelizando y evangelizar educando.
Este segundo año del Oratorio Vacacional Tarcisio Batocchio demostró que, cuando se trabaja con corazón y en comunidad, se siembran semillas de fe, esperanza y fraternidad que marcarán la vida de los niños para siempre.
Carlos Villalta Reinoso
Equipo de Comunicación | Unidad Educativa Agronómico Salesiano