Parroquia La Merced de Machala vivió con fervor la Solemnidad del Corpus Christi

Las calles de nuestro barrio se transformaron en un santuario vivo. Bajo la luz dorada de la fe y el eco de los cantos, celebramos con profundo fervor la Solemnidad del Corpus Christi, manifestación gloriosa de la presencia real de Cristo en la Eucaristía.

La jornada inició con momentos de adoración al Santísimo Sacramento, donde cada sector parroquial, con alma recogida y corazones abiertos, se entregó a ese encuentro íntimo con el amor vivo. El silencio hablaba y las miradas orantes decían más que mil palabras.

La Eucaristía, presidida por el P. Servio Rojas, SDB, nos recordó que Jesús Eucaristía no solo se adora en el altar, sino también en el rostro del que sufre, del que espera, del que clama. Fue un llamado urgente y amoroso a vivir con un corazón eucarístico más allá de los muros del templo.

La fe salió al encuentro del mundo cuando, entre flores, incienso y alabanzas, partimos en solemne procesión con el Santísimo por nuestras calles. Niños, jóvenes, adultos y ancianos marcharon como un solo cuerpo, testimoniando con paso firme que Cristo camina con nosotros y permanece en medio de su pueblo.

Agradecemos profundamente a cada fiel, grupo pastoral y voluntario que hizo posible esta hermosa fiesta. La fe se celebra, sí… ¡Pero también se camina, se vive y se comparte!

Elizabeth Juárez/ Neiser Carchipulla
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