Del martes 12 al jueves 14 de agosto, en las tres instancias de la Fundación Proyecto Salesiano Costa Norte: Esmeraldas, San Lorenzo y Santo Domingo se vivió con fe, entusiasmo y fraternidad el Triduo en honor a Don Bosco, como preparación a la gran fiesta por los 210 años del nacimiento de Don Bosco.
El primer día, a través de cantos, oraciones y la reflexión de la Palabra, se recordó el ardor misionero de aquellos primeros salesianos que partieron a anunciar el Evangelio más allá de las fronteras hace ya 150 años. La reflexión se centró en la despedida y las crónicas de viaje de la primera expedición misionera, invitando a los niños, jóvenes y educadores a mantener vivo el fuego de la misión y a seguir el ejemplo de quienes, con generosidad, llevaron el carisma salesiano a nuevas tierras.
«Cartas misioneras de Don Bosco y a Don Bosco», fue el tema del segundo día que permitió profundizar en consejos prácticos, valores humanos y espirituales, y en el llamado a ser protagonistas de una misión viva. Con dinámicas como rompecabezas, pinturas y juegos participativos, se reflexionó sobre la importancia de fortalecer el liderazgo en jóvenes, educadores y animadores.
El ejemplo de Mons. Juan Cagliero, primer misionero salesiano, como modelo de entrega generosa al prójimo, motivó a los participantes a practicar la caridad cotidiana y a vivir con alegría el legado misionero de Don Bosco, siempre confiando en la Providencia de Dios.
El tercer día del Triduo tuvo como tema central la invitación: «Hoy es el día para despertar en nosotros el espíritu misionero». Siguiendo el ejemplo de los primeros salesianos, se animó a todos a ser valientes, solidarios y generosos, llevando el amor de Dios a cada rincón de la vida diaria.
El viernes 15 de agosto, en las tres instancias de la Fundación, se conmemoró los 210 años del nacimiento de san Juan Bosco con eucaristías en su honor. En Esmeraldas presidió el P. Robert García, director de la Fundación; el P. Marco Paredes, vicario de la comunidad, en San Lorenzo y el P. Harry Icaza, animador pastoral, en Santo Domingo. Tras la misa, las comunidades vivieron momentos de fraternidad y fiesta salesiana, con actividades como poesías dedicadas a Don Bosco, gymkana, concursos como «Quién sabe, sabe», entre otras. La jornada culminó con la entrega de refrigerios, signo de gratitud y alegría compartida.
Más de dos siglos después de su nacimiento, Don Bosco sigue iluminando el camino de niños, jóvenes y familias. Su mensaje permanece vivo en el carisma salesiano que inspira a educadores y animadores a servir con alegría. Como él mismo decía: «La santidad consiste en estar siempre alegres y cumplir bien con nuestros deberes».
Para la Fundación Proyecto Salesiano Costa Norte esta celebración es una oportunidad de renovar su promesa de acoger y educar con cariño y esperanza a nuestra niñez, adolescencia y juventud junto con sus familias en situación de vulnerabilidad, inspirados siempre en el testimonio de Don Bosco, quien consagró su vida al servicio de la juventud.
Andrea Altafuya M.
Referente Local de Comunicación | Fundación Proyecto Salesiano Costa Norte