Fundación Proyecto Salesiano Guayaquil celebró 30 años de labor

En el día de la conmemoración de los 208 años del natalicio de Don Bosco, la Fundación Proyecto Salesiano Guayaquil celebró su trigésimo aniversario de labor dedicada a la atención a niñas, niños y adolescentes en condiciones de riesgo y vulnerabilidad, especialmente a los que se encuentran en «situación de calle» y sus familias, mediante una propuesta educativa pastoral cimentada en la pedagogía de Don Bosco.

La labor de la fundación inició en 1993 con la apertura de las puertas del albergue P. Antonio Amador en el centro de la ciudad de Guayaquil para los chicos de la calle. Su objetivo era crear una etapa preventiva que acoja a los jóvenes de los barrios más vulnerables.

El programa de celebración se desarrolló en las instalaciones de Casa Don Bosco. En un primer momento, se celebró una eucaristía presidida por el Juan Flores, vicario inspectorial, con el acompañamiento de los salesianos que forman parte de la comunidad.

A continuación, se efectuó un acto solemne donde estuvieron presentes varias autoridades locales, representantes de organizaciones aliadas, colaboradores seglares y los destinatarios de la misión. Una de las personas que intervino fue Mauricio Bonifaz, coordinador de la organización Kinder Not Hilfe- KNH, que manifestó lo siguiente: «Es un honor sentirnos socios de esta gran obra de edificación humana; tenemos una satisfacción profunda por seguir haciendo camino con la Fundación. Quiero recordar una frase de Don Bosco: ‘De la sana educación de los jóvenes depende la felicidad de las naciones’, y este pueblo necesita de esta visión solidaria como la que hacen nuestros hermanos salesianos cada día».

Luego, intervino Tomás Ordoñez, exalumno y actualmente colaborador de la Fundación Proyecto Salesiano Guayaquil, quien agradeció a la institución por haberlo formado como una persona de bien. «Mirando atrás en el tiempo, es imposible no tener sentimientos de nostalgia y orgullo por todas las experiencias vividas. A medida que avanzamos en nuestros diferentes caminos, llevamos con nosotros el milagro de Don Bosco. Somos embajadores de los valores aprendidos aquí: compasión, perseverancia y amor».

A nombre de la Inspectoría, el padre Juan Flores les motivó a los colaboradores de la Fundación Proyecto Salesiano Guayaquil a que no se conformen con ser únicamente quienes van y comparten un poco de su vida con los destinatarios, sino que ?Sean otros Don Bosco porque los niños y jóvenes que están en esta obra los necesitan?.

«Queridos jóvenes sigan el ejemplo de los buenos salesianos: trabajo, oración, templanza y entrega. A nombre de la Inspectoría Salesiana seguimos comprometidos en este trabajo porque donde están los jóvenes, está el amor de nuestro padre Don Bosco», concluyó el padre Juan.

Finalmente, se rindió un pequeño homenaje al director saliente, padre Esteban Ortiz, quien concluye su labor en esta obra. A través de un emotivo video, los destinatarios le enviaron sus saludos y mensajes de agradecimiento por su acompañamiento y su cercanía como un verdadero padre.

Oficina Salesiana de Comunicación

Fecha: 2023-08-16