Los Directores Salesianos de la Inspectoría Salesiana del Ecuador vivieron una experiencia de fe, comunión y gratitud durante su visita a los lugares natales del Siervo de Dios P. Carlos Crespi Croci y de Santa María Troncatti, dos figuras emblemáticas del carisma salesiano.
El 24 de octubre, la jornada se desarrolló en Legnano, ciudad natal del padre Crespi, misionero, educador y benefactor cuya causa de beatificación avanza con esperanza. Los directores fueron recibidos por el Comité Pro Beatificación, cuyos miembros compartieron el cariño que la ciudad mantiene hacia su hijo ilustre y los avances del proceso canónico.
Los peregrinos visitaron los lugares más significativos de la vida del Padre Crespi: la iglesia donde fue bautizado, recibió la confirmación y su primera comunión, así como el templo donde celebró su primera misa. Cada espacio se convirtió en un momento de oración y reflexión sobre su entrega misionera y su compromiso con los más necesitados.
Uno de los momentos más destacados fue la recepción oficial del alcalde de Legnano, quien reafirmó el compromiso de la ciudad con la memoria del padre Crespi y su apoyo a la causa de beatificación. La delegación visitó también la Residencia Socio Sanitaria Padre Carlos Crespi, institución que atiende a personas con discapacidad y que mantiene vivo su espíritu de servicio. La jornada concluyó con una Eucaristía junto al Comité Pro Beatificación y una visita al monasterio de las Carmelitas Descalzas, en un ambiente de gratitud y comunión.

Los días 25 y 26 de octubre, los directores salesianos continuaron su peregrinación hacia Corteno Golgi, en los Alpes italianos, donde nació Santa María Troncatti, misionera salesiana y ejemplo de amor, sencillez y entrega al prójimo. La comunidad local los acogió con gran alegría y los guió por los lugares que marcaron la infancia y vocación de la santa.
Durante su estancia, participaron en la Eucaristía en Santicolo, en una vigilia misionera y en la Misa dominical en la iglesia donde fue bautizada Santa María Troncatti, junto a una delegación de las Hijas de María Auxiliadora.
La visita permitió a los salesianos renovar su compromiso pastoral y misionero. «Nos vamos con el corazón lleno de gratitud y esperanza, fortalecidos en la fe y comprometidos a seguir el ejemplo de Sor María Troncatti en nuestro servicio a los jóvenes y a las comunidades más necesitadas», expresaron los participantes al concluir la peregrinación.

P. Fabián Lozada, SDB
Cronista – Peregrinación Directores Salesianos




