Diversión, aprendizaje y mucha emoción en el inicio de la catequesis de la Parroquia Beato Esteban Sándor

El sábado 22 de marzo, los oratorios de la Parroquia Beato Esteban Sándor de Guayaquil: San Juan Bosco y San Francisco de Sales, iniciaron un nuevo ciclo catequético, acogiendo con entusiasmo a niños, niñas y jóvenes que forman parte de este camino de formación en la fe. La jornada estuvo llena de alegría, dinámicas recreativas y momentos de integración, permitiendo que los participantes se familiaricen con el entorno y con quienes los acompañarán en este proceso.

La jornada estuvo cargada de energía, con dinámicas recreativas que ayudaron a romper el hielo y fortalecer la convivencia. Entre juegos y desafíos, los participantes no solo se divirtieron, sino que también conocieron las normas y objetivos de este año, así como a los catequistas que los acompañarán en su formación espiritual. Cada actividad fue pensada para que, desde el primer día, se sintieran parte de una gran familia.

En el oratorio San Juan Bosco, la emoción se trasladó a la misa familiar, un momento especial donde, a través de una actividad interactiva, los niños y jóvenes descubrieron de forma divertida quiénes serán sus catequistas. La sorpresa y las risas no faltaron, cerrando la jornada con un ambiente de comunidad, fe y compromiso.

El domingo, la alegría continuó con el inicio de Infancia Misionera en el oratorio San Juan Bosco. Los más pequeños se reunieron para conocer más sobre su papel como pequeños misioneros de Cristo, reforzando su amor por la evangelización y la solidaridad. Con dinámicas y mensajes inspiradores, se dio inicio a un espacio donde los niños no solo crecerán en la fe, sino que también aprenderán a llevar el mensaje de Jesús a los demás.

Melissa Quimí
Parroquia Beato Esteban Sándor