Integrantes del MJS del Sánchez y Cifuentes reciben la camiseta que simboliza su entrega y misión
El 11 de marzo, los jóvenes del Movimiento Juvenil Salesiano (MJS) de la Unidad Educativa Fiscomisional Salesiana Sánchez y Cifuentes de Ibarra vivieron un momento significativo al recibir con alegría uno de los signos más representativos de su compromiso: la camiseta del MJS. Este distintivo no solo simboliza su pertenencia activa a los grupos de la institución, sino también su entrega, servicio y vivencia del espíritu salesiano.
La jornada inició con una oración profunda, en la que cada joven puso en manos del Señor sus dones y talentos, pidiendo su guía para que florezcan en el servicio al grupo. Posteriormente, se reflexionó sobre el verdadero significado de pertenecer al MJS y la responsabilidad que ello implica. Se recordó que el MJS no es una simple asociación, sino un movimiento conformado por jóvenes que participan en diversas agrupaciones dentro de la Pastoral Juvenil Salesiana. Esta apertura permite que su misión se extienda a toda la Iglesia y a la juventud en general, impulsando a sus miembros a testimoniar a Cristo, compartir su misterio con otros y anunciarlo con alegría.
Con gran entusiasmo, los jóvenes reafirmaron su compromiso de portar con orgullo la camiseta del MJS, asumiendo el reto de ser parte activa y comprometida en sus grupos. Voluntariamente, expresaron su decisión de testimoniar a Cristo, Buen Pastor, y compartir la alegría del encuentro con Él, viviendo los valores de la Espiritualidad Juvenil Salesiana y esforzándose por ser «buenos cristianos y honrados ciudadanos».
La jornada contó con la presencia y apoyo de las familias, fortaleciendo el acompañamiento en este camino de fe y compromiso. Helí Rueda, director y rector de la institución, dirigió un mensaje preciso a los jóvenes, animándolos a vivir con alegría su compromiso y recordándoles las reglas de la Sociedad de la Alegría, establecidas por Don Bosco: evitar conversaciones que puedan avergonzar a un buen cristiano, cumplir con los deberes escolares y religiosos, estar siempre alegres y evitar todo aquello que produzca tristeza. Estas normas, no las comento no solo como para cumplir reglas, sino como una guía para crecer en santidad y en la verdadera alegría salesiana.
¡Que este signo fortalezca la identidad de nuestros jóvenes y los motive a seguir caminando juntos en la misión salesiana!
Juan Fernando Proaño
Referente Local de Comunicación | UE Fiscomisional Salesiana Sánchez y Cifuentes