Oswaldo Mora y Adrián Ayala se preparan para realizar su Profesión Perpetua
Del 6 al 23 de enero de 2024, en la Casa Ceferino Namuncurá de Junín de Los Andes, Argentina, están reunidos 14 jóvenes salesianos con motivo del Encuentro de Preparación para la Profesión Perpetua de la Región América Cono Sur. Estos jóvenes salesianos pertenecen a las inspectorías de: Brasil (BRE: 3, BSP: 2, BPA: 1, BMA: 2, BCG: 1), Paraguay (1), Chile (1), Argentina (1) y dos de Ecuador: Oswaldo Mora y Adrián Ayala. Se encuentran acompañados por el equipo formativo conformado por el P. Vicente Tirabasso (ARS), P. Paulo Profilo (BSP) y P. Félix Levín (CIL).
En este encuentro, los jóvenes se encuentran profundizando en su propia historia vocacional, discernimiento y motivaciones en vista de fortalecer su opción de seguimiento de Cristo al estilo de Don Bosco. En esta dinámica, ellos viven momentos de oración, fraternidad y de compartir en base a las Constituciones, Criterios y Normas, Ritual de la Profesión y temáticas afines a la vida religiosa, pero con una metodología experiencial y en orden a caminar hacia una humanización plena y una vida religiosa integrada.
Desde Junín de los Andes, nuestro hermano Oswaldo comparte las vivencias de este encuentro:
¿Qué aprendizajes te deja ser parte de este encuentro?
Aprendí lo importante que tiene la formación en todas sus dimensiones, así como a reconocer la intervención de Dios en la historia de mi vida. También, aprendí que la vocación es un regalo de Dios que debo cuidarla con la oración y el acompañamiento espiritual.
¿Qué ha significado compartir este encuentro con hermanos de otros países?
El hecho de compartir con hermanos de otras inspectorías tiene un gran significado porque conoces otras experiencias, compartes momentos de oración, alegrías y también momentos de tristeza. Estos elementos nos recuerdan la gracia de la vocación y que, a pesar de ser de diferentes lugares y lenguas, nos sentimos como en familia.
¿Qué representa para ti prepararte para realizar la Profesión Perpetua?
Prepararme para la Profesión Perpetua tiene un gran significado para mi vida. Primero el sentido de gratitud por la vocación salesiana, después el compromiso de seguir formándome a la imagen de Jesús Buen Pastor para la misión entre los jóvenes. Y, finalmente, continuar trabajando con mi historia personal y seguir fortaleciendo mis motivaciones.
Finalmente, creo que es un momento para ponerme en manos de María auxiliadora y dejar que sea la maestra en mi vida como lo fue con Don Bosco.
Pongamos en nuestras oraciones a Oswaldo, Adrián y a los demás hermanos para que puedan vivir una fecunda experiencia de conversión y profundización en su opción religiosa, en conformidad con la voluntad de Dios y el carisma salesiano.
ANS / Cristian Calderón – OSC
Fecha: 2024-01-15