¡Hasta siempre P. Iván Segarra! Una despedida marcada por la gratitud y esperanza en Esmeraldas

Entre bailes, cantos, juegos y palabras de agradecimiento, la comunidad de la Unidad Educativa Fiscomisional María Auxiliadora (UEFMA) de Esmeraldas despidió al P. Iván Segarra. Su partida no solo significó el cierre de un capítulo en la vida pastoral de nuestra institución, sino también la oportunidad de reconocer y celebrar la huella imborrable que dejó a lo largo de más de seis años de servicio.

Miembros y grupos del Movimiento Juvenil Salesiano (MJS), la pastoral y distintas áreas de la institución se unieron en este homenaje. Entre los mensajes más emotivos resonaron frases como: «Gracias, padre, por su paciencia, servicio y corazón»; «Con mucha alegría, porque sé que a la parroquia a la que va será esa luz que fue para nosotros».

Como representante del CIRC, tuve la oportunidad de recoger los testimonios compartidos por quienes conocieron de cerca al padre Iván. Desde anécdotas de su llegada a la institución, el 1 de abril de 2019, hasta los momentos de mayor cercanía en los patios, en las aulas o en las actividades pastorales, cada recuerdo reflejaba la esencia de un sacerdote que supo ganarse el cariño de grandes y pequeños.

La comunidad evocó también su trayectoria de vida: desde su nacimiento, el 14 de agosto de 1961, hasta su ordenación sacerdotal, el 13 de agosto de 1994, ha entregado más de veinte años a su vocación, marcada por la alegría y la dedicación.

El evento estuvo lleno de expresiones artísticas que reflejaron la identidad esmeraldeña y el espíritu salesiano. El grupo de marimba Ceferino Namuncurá, bajo la coordinación de Jessy Quiñónez, presentó un baile tradicional que llenó de ritmo, color y orgullo la despedida. La orquesta Chiquita Band puso a todos a bailar con su contagioso repertorio, mientras que estudiantes y docentes prepararon coreografías, dramatizaciones y cantos que reforzaron el ambiente festivo y emotivo.

La despedida no se limitó a lo artístico. También se organizaron actividades comunitarias, como rifas y bingos, que no solo aportaron a la alegría del encuentro, sino que reflejaron esa unión que el padre Iván siempre promovió entre familias, jóvenes y docentes.

El P. Enrique Lima, director de la Comunidad San Juan Bosco, expresó unas palabras cargadas de sencillez y profundidad: «Ninguno de nosotros somos perfectos, pero debemos ser agradecidos, y eso es lo que nos dice el padre Iván».

El homenaje alcanzó su punto más emotivo cuando el propio padre Iván tomó la palabra para agradecer con humildad: «Gracias de corazón por este homenaje tan lleno de amor. Me voy con mucha gratitud por cada palabra, cada canto y cada sonrisa que me regalaron en estos años. Ustedes han sido parte de mi vida y siempre los llevaré en mis oraciones. Que María Auxiliadora los acompañe y bendiga siempre».

La despedida al padre Iván Segarra no fue solo un acto de gratitud hacia un sacerdote querido, sino también un recordatorio de que su misión pastoral continúa más allá de nuestra institución. Aunque emprende un nuevo camino, en cada corazón deja sembrada una enseñanza de servicio, alegría y esperanza.

Autor: John Lucas España
Asesor: Elio Ramírez

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

This field is required.

This field is required.